Países que hoy son prósperos han tenido líderes que han transformado la pobreza en riqueza. Ejemplo Singapur, Malasia, Corea del Sur, Botsuana, Suecia, Irlanda, India entre otros. Colombia se ha visto afectada por un político cuyo sinónimo es ser corrupto inepto, mentiroso que no cumple lo que promete, de no confiar en lo que dice, sin conocimiento, manipulador, que vende su alma por dinero olvidando a quien representa. Se debe enfrentar la corrupción con todo el rigor. Es necesario reducir el congreso y es que un congresista no debe tener sueldo, es un servicio social además se le deben quitar todas las prebendas. No es con reformas tributarias, sino que el dinero se pierde por corrupción, que ocurre en el congreso, asambleas departamentales, concejos municipales, alcaldía y gobernaciones. Al año se pierden $50 billones y en el sector privado $60 billones con conductas corruptas de evasión fiscal, acuerdos por debajo de la mesa por contratos y fraude contable. Con $110 billones utilizados correctamente tendríamos la calidad de vida de un país europeo y prosperidad para todos. Pero, para que eso ocurra, debemos aprender a votar. Y no es un sueño lo podemos lograr tratando al corrupto como un verdadero delincuente, en Estados Unidos el corrupto lleva el uniforme naranja, grilletes y se le limita las horas de sol y de visitas. Se ha preguntado cuánto cuesta el funcionamiento del congreso. Cada hora los colombianos pagamos $18 millones, $13.000 millones al mes y $153.000 millones al año, para sostener 263 congresistas, 2.063 asistentes, 538 empleados de planta. Mientras la Cámara de Representantes le vale al pueblo $91.000 millones. Más los lujos, que incluyen viáticos de los escoltas, teléfonos celulares por $600.000 de consumo, lo que suma $150 millones en promedio. En cocteles se gastan al mes $150 millones más $2 millones en flores. Si el gobierno quiere dinero lo debe sacar de reducir el congreso y quitar el sueldo y gastos del congresista. El senado de Irlanda solo tiene 63 senadores y Bélgica tiene solo 12 en el comité de regiones. Se hace necesario una reforma a la financiación de las campañas que evite el ingreso de grupos empresariales. Se debe acabar la prisión domiciliaria y exigir el reintegro del dinero robado, quitar los beneficios judiciales a los corruptos. 14.2 millones de hogares se ven afectados cuando elegimos mal a los presidentes, congresistas, diputados, concejales, alcaldes y gobernadores. No es con más impuestos, subir el precio a la gasolina, montar peajes cada 30 kilómetros, todas metidas de patas, que solo generan improductividad. Mientras hay miles de hogares que solo tienen una comida al día.
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